Sucedió sin avisar, sin reparar en la cascada de sentimientos de uno y de otro y sin dar opción a otra expresión que no fuera la del asombro. Se cruzaron un instante, cuando ella volvía del trabajo y él lo hacía de un viaje, y la mañana soleada se tiñó de nubes. Ella volvió a sentir su corazón desbocarse y él se estremeció al recordar una historia inacabada. El saludo fue apenas un guiño, luego ambos bajaron la mirada.
Ella recordó con lágrimas y él lo hizo con mal humor, pero ninguno se atrevió a derribar el muro que los había separado. Nadie más supo de aquel encuentro, e incluso ellos mismos lo olvidaron. Era mejor no revolver el pasado, más aun cuando los dos sabían que se amaban... y que nunca tendrían oportunidad de encontrarse.
Una escena estilo Casablanca, de corazones rotos y pasado que se creía olvidado. Brillante ;)
ResponderEliminarCuantos sentimientos transmite en pocas palabras, me parece una continuación del ralato anterior.
ResponderEliminarBesos!!
"La cobardía es asunto
ResponderEliminarde los hombres, no de los amantes.
Los amores cobardes no llegan a amores,
ni a historias,
se quedan allí.
Ni el recuerdo los puede salvar,
ni el mejor orador conjugar".
Silvio sabía.
Soy Carlos de Apenas penas)